Masaje sensitivo consciente.

La caricia que estás necesitando

Para aquellas que les gusta sentir y gozar de las caricias de un masaje en todo el cuerpo, explorando y encontrando  placer corporal  a través de las manos del masajista.

Este masaje está hecho para vosotras; sois la invitada a descubrir el deleite de tu piel.

Los masajes se realizan con emulsiones calientes, el ambiente te envuelve con suaves inciensos y música de relajación... y lo más importante durante la sesión es el estado de encontrarte con tu ser, el silencio de tu mente y recibir la energía de las manos del masajista.

Caricias suaves y sensitivas por todo tu cuerpo para sentirte plena y feliz. 

Mímate, desconéctate de las tensiones y entrégate al placer de las sensaciones

Piernas pesadas, cansadas, hinchadas.

 

Masaje profundo y de relajación para las piernas, una acción relajante y refrescante.

Alivia el dolor y previene problemas circulatorios.

Masaje en la espalda.

 

Un masaje en la espalda ayudará a eliminar la fatiga de nuestro cuerpo, relajando la musculatura de la zona donde se acumula más tensión y liberando el estrés del día a día.

Percepción holistica sinestésica.

Oirás el color con los ojos cerrados.

Veras el sonido de la música.

Gustarás del aroma de los aceites calientes.

Sentirás el olor del tacto.

Aceites y aromas

La mano desnuda desliza mal sobre la piel, pues se calienta rápidamente por la frotación. Se necesita interponer entre ambas un lubricante como aceite, crema o talco.

El aceite es generalmente el preferido y el favorito es el de almendras dulces por ser ligero, poco graso y absorberse con rapidez, aunque también pueden usarse el de pepita de uva si la piel es muy grasa, o los de jojoba, girasol u oliva. 

A estos aceites de base se les pueden añadir gotas de aceites esenciales de plantas , que por su aroma o propiedades pueden mejorar los efectos que se buscan con el masaje. 

El aceite esencial de lavanda y mejorana, por ejemplo, tienen efectos relajantes y combaten el insomnio; la rosa, el sándalo y el jazmín aumentan la libido; la naranja, el nerolí y el petitgrain liberan las tensiones, y la melisa y el romero son estupendos tónicos estimulantes.